Luego de catorce horas de reuniones, dieciocho delegaciones, entre otras, las de Argentina, Brasil, China e India por el G20; Australia, por el Grupo Cairns; Suiza, por el G10; Indonesia, por el G33; Tanzania y Mauricio por el G90; la Unión Europea y Estados Unidos que fueron convocadas por el Presidente del Consejo General y el Director General de la OMC llegaron a un acuerdo que permite destrabar la "Ronda del Desarrollo" que fuera lanzada en el 2001 en Doha, Qatar.
Las negociaciones fueron necesarias dado que el texto presentado no recogía las legítimas aspiraciones de la gran mayoría de los miembros de la OMC y era preciso buscar alternativas que pudieran dar satisfacción a todos los participantes.
El Secretario de Relaciones Económicas y Comercio Internacional, Martín Redrado, que encabezó la delegación argentina participó en las reuniones y tuvo diversos encuentros con los jefes de las delegaciones de UE y Estados Unidos, manteniendo permanente contacto con los Ministros Bielsa y Lavagna.
Desde su llegada a Ginebra la delegación argentina había señalado sus objeciones al texto producido por el Presidente del Consejo.
Cabe destacar que luego de difíciles negociaciones se llegó a un acuerdo marco que encarrila las negociaciones y que habían sufrido un "impasse" en la Conferencia Munisterial de Cancun.
La Argentina ha logrado introducir durante este proceso negociador tres elementos clave para el desarrollo de su agroindustria. Primero, el texto refleja ahora el compromiso para una efectiva eliminación en una fecha a determinar de todos los subsidios a las exportaciones, incluyendo los créditos a las exportaciones, la ayuda alimentaria y las empresas exportadoras del Estado.
Su eliminación garantiza poner en un pie de igualdad a las reglas para los productos agrícolas con las reglas para los productos industriales.
Otro punto importante es que habrá una reducción efectiva de los subsidios a la producción, que deberá ser negociada. No obstante, en el primer año del período de implementación la reducción será del 20%. Esta última cifra es sumamente relevante ya que es equivalente a toda la reducción acordada en la Ronda Uruguay del GATT.
Esto implica una limitación del subsidio distorsivo en la UE de aproximadamente 20.000 millones de dólares, mientras que en el caso de Estados Unidos y Japón es de casi 9.000 millones de dólares respectivamente.
Las modalidades y el nivel de las reducciones de los aranceles serán discutidos en la próxima etapa, así como la expansión de los contingentes arancelarios (cuotas) multilaterales.
Por otra parte es importante subrayar el paralelismo logrado entre la negociación de agricultura y la negociación de acceso a mercado en productos industriales. En efecto, el Secretario Redrado dijo que se logró que el texto tenga la suficiente flexibilidad para permitirles a los países en desarrollo incorporar sus demandas sin sacrificar la competitividad de nuestras industrias.
La Argentina una vez mas demostró que sus intereses no se limitan a la agricultura sino que siguió abordando la negociación multilateral desde un enfoque pluritemático que abarca entre otros, bienes industriales, servicios y propiedad intelectual.
El jefe de la delegación argentina señaló asimismo que esta etapa ha servido para relanzar la negociación con una base suficientemente amplia dando lugar a nuestros interéses ofensivos en el comercio y sin sacrificar sector alguno de nuestra economía.
Buenos Aires, 31 de julio de 2004