En un acto realizado en la Embajada del Líbano en Buenos Aires, el Vicecanciller Eduardo Zuain anunció el envío por parte del Gobierno argentino de ayuda humanitaria destinada a los refugiados que se encuentran en ese país.
El envío argentino incluye 4 toneladas de arroz, 75 carpas estructurales, 500 frazadas, pastillas potabilizadoras de agua con capacidad para tratar 10 millones de litros, y 150 kits de cocina, entre otros elementos.
La ayuda de nuestro país será enviada a través de Cascos Blancos, que es el organismo de la Cancillería encargado de ejecutar la asistencia humanitaria internacional. Cascos Blancos es una iniciativa de la política exterior argentina que ofrece a la comunidad internacional un cuerpo de voluntarios en apoyo de las actividades de socorro inmediato, rehabilitación, reconstrucción y desarrollo, destinado a aliviar situaciones críticas.
Mediante este envío, la Argentina suma sus esfuerzos a los de la comunidad internacional para ayudar a los cerca de un millón quinientos mil refugiados de Siria e Irak que desde 2011 se ven forzados a dejar sus hogares y buscan techo, alimentación y atención sanitaria en El Líbano.
La donación es una nueva muestra del profundo compromiso que mantiene la República Argentina con El Líbano, ya expresada con anterioridad durante la Conferencia Internacional de apoyo a ese país en 2014, en la que el Gobierno argentino puso a disposición los equipos de voluntarios expertos de Cascos Blancos para colaborar en los campos de refugiados.
El acto fue encabezado por el Embajador Antonio Andary y contó con la presencia de líderes religiosos y representantes de asociaciones de la colectividad árabe de la Argentina.