El secretario de Comercio Internacional, Martín Redrado, se suma
hoy a la delegación encabezada por el canciller Ruckauf en Bruselas,
con el fin de abrir nuevos mercados para los productos argentinos. La
pesca, frutas, hortalizas, aceites vegetales e indumentaria estarán
al tope de la agenda argentina. Para ello, sumado a las reuniones con
el responsable comercial de la Unión Europea, Pascal Lamy, Redrado
mantendrá reuniones técnicas con el equipo europeo a fin
de avanzar en estos y otros productos. También, Redrado expondrá
sobre la próxima oferta que el Mercosur realizará el 28
de febrero en su negociación por una zona de Libre Comercio con
la Unión Europea.
Esta visita brinda una importante
señal en la relación Unión Europea-Argentina. Luego
de más de un año del inicio de la crisis y pasado lo peor,
el propósito de esta visita consiste en explicar el por qué
de la crisis, las medidas adoptadas hasta el presente para atenuar sus
efectos, la incipiente reactivación de la actividad productiva,
pero principalmente transmitir a las más altas autoridades del
organismo europeo el propósito de la Argentina de reinsertarse
en la economía mundial, cumplir con sus compromisos internacionales
y continuar trabajando para el fortalecimiento de las relaciones con
la Unión Europea.
El secretario Redrado ha mantenido
contacto con las autoridades europeas en el marco de la Cumbre Iberoamericana
o en las reuniones UE-Mercosur, y en especial con el Comisario Europeo
de Comercio, Pascal Lamy, responsable de las negociaciones comerciales
MERCOSUR-UE y en la OMC. Pero esta es la primera vez que las reuniones
se mantendrán en Bruselas y servirán para dar una señal
de la importancia que la Argentina le asigna a Europa en su relacionamiento
externo. En ese sentido, resulta significativa la composición
de la delegación, con el propósito de fortalecer el contacto
con Europa y renovar los esfuerzos para el diálogo constructivo.
La envergadura de la crisis argentina
ha provocado desconcierto entre los países europeos a todos los
niveles.
La Argentina necesita del apoyo internacional,
y en ese sentido, ha sido importante la actitud constructiva adoptada
por los representantes de los países europeos en los Organismos
Financieros Internacionales, y la reconsideración para el uso
del SGP y el otorgamiento de la cuota especial de carne vacuna por 10.000
tns. Estos signos son altamente valorados por nuestro país.
La Argentina está desarrollando
un gran esfuerzo para mejorar el acceso de mercado para sus productos
de exportación, y está trabajando en varios frentes simultáneamente:
con EE.UU., México, la CAN, en el ALCA y en los trabajos para
el Acuerdo Mercosur-UE. Para que el plan de salida de la crisis sea
sustentable y puedan afrontarse los compromisos externos, es crucial
la expansión de las exportaciones. La crisis argentina respondió
tambien a algunas interpretaciones realizadas por los mercados sobre
base a algunos índices considerados representativos para evaluar
la capacidad de pago de la deuda externa: Deuda Externa / Exportaciones,
Servicios de la Deuda / Exportaciones y Deuda Externa / PBI. En ese
sentido, la Argentina deberá mejorar el perfil exportador y lograr
un mejor acceso a los mercados externos para modificar la percepción
de los mercados.
La Unión Europea es un importante
comprador de productos argentinos pero en esta coyuntura resulta insuficiente.
Durante los años 90, la UE obtuvo un importante superavit comercial
que se ha revertido en esta coyuntura debido a la recesión interna.
Un mayor y efectivo acceso para los productos argentinos constituirá
un importante aliciente para las empresas argentinas y creará
condiciones favorables para disminuir el desempleo y reactivar el mercado
interno. La consolidación del proceso de recuperación
económica generará beneficios no sólo a las empresas
argentinas sino también a las empresas de origen europeo que
han realizado inversiones en el país.
La Argentina y la Unión Europea
mantienen una permanente discrepancia sobre la política agrícola,
que se manifiesta con dureza en el marco de la Organización Mundial
de Comercio. Pero la Argentina considera que esas discrepancias deben
ser mantenidas en dicho contexto, y que es necesario trabajar intensamente
para concretar el Acuerdo Mercosur-UE, donde se podrá encontrar
un término medio para salvar las dificultades. La Argentina quiere
manifestar su voluntad de llegar a este Acuerdo a la brevedad, que permita
mejorar las condiciones de acceso, de cooperación y de diálogo
político.
21 de enero de 2003