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Rodríguez Giavarini pidió “medidas concretas” para instrumentar la Corte Penal Internacional

Miércoles 20 Junio 2001
Información para la Prensa N°: 
161/2001

 

Lo
dijo al inaugurar el Seminario Regional para la Ratificación
e Implementación de la instancia, 

a la que consideró como “una iniciativa global que enaltece
a la comunidad internacional”

 

 El canciller Adalberto Rodríguez
Giavarini pidió hoy “medidas concretas” que permitan avanzar
en la “ratificación e implementación” del Estatuto de
la Corte Penal Internacional, al inaugurar el Seminario Regional convocado
a ese fin en Buenos Aires.

 Esa instancia, que juzgará crímenes
de genocidio, de lesa humanidad y de guerra, “es una iniciativa global
que enaltece a la comunidad internacional” y su futura implementación
“reafirma el compromiso de los países de nuestra región
con el desarrollo del derecho y la justicia como medida indispensable
para fortalecer la paz”, afirmó Rodríguez Giavarini.

 El Canciller realizó la apertura
del Seminario que se desarrollará hasta este viernes en el
Palacio San Martín, con la participación de 70 expertos
de los países latinoamericanos, tanto gubernamentales como
de la sociedad civil, vinculados con el establecimiento de la Corte
Penal Internacional.

 “El éxito de la campaña
mundial a favor de la instrumentación de la Corte demuestra
la importancia de continuar con la tarea de alimentar la beneficiosa
modalidad de acción conjunta entre gobiernos y organizaciones
no gubernamentales, que caracterizó el proceso de elaboración
del Estatuto”, señaló el jefe de la diplomacia argentina.

 Rodríguez Giavarini evaluó
que con el Estatuto de Roma “la comunidad internacional dio un masivo
no  a la cultura de la impunidad” y agregó que las 139
firmas y las 34 ratificaciones recogidas hasta ahora “permiten asegurar
que la Corte Penal Internacional será prontamente una realidad
y demuestra que el entusiasmo en torno a esta iniciativa, lejos de
haberse atenuado, está más firme que nunca”.

 Destacó el “principio de complementariedad”
de la instancia jurídica, que “tendrá competencia para
hacer efectiva la responsabilidad penal individual solamente por aquellos
crímenes internacionales que ofenden a la conciencia universal
en su conjunto y respecto de los cuales fue posible lograr un común
denominador aceptable para los principales sistemas jurídicos
y políticos del mundo”. 

 

De igual modo, recordó que la Corte
“no tendrá primacía sobre los sistemas nacionales sino
que ejercerá sus funciones de manera excepcional cuando se
determine que éstos no pueden o no quieren hacerlo”.

 Rodríguez Giavarini explicó
que en la Argentina se conformó una Comisión Interministerial,
con la participación de penalistas de reconocida trayectoria
y expertos de la Cancillería y de las carteras de Justicia
y Defensa, que “en estos momentos elabora un proyecto de ley de implementación
del Estatuto de Roma”.

 El Seminario Regional para la Ratificación
e Implementación del Estatuto de la Corte Penal Internacional,
que culminará este viernes, cuenta con el auspicio del Ministerio
de Justicia y Derechos Humanos y con el apoyo de organizaciones no
gubernamentales, en particular de Human Rights Watch, del Instituto
Latinoamericano de las Naciones Unidas para la Prevención del
Delito y el Tratamiento del Delincuente (ILANUD), y de los Gobiernos
de Canadá y Francia.

 Las jornadas se dividen en paneles de
discusión, de participación abierta, y talleres de trabajo
dirigidos a los 70 expertos participantes.

 La Corte Penal se erigirá como
una instancia internacional que garantice que los crímenes
de genocidio, de lesa humanidad y de guerra, que se cometan en el
futuro y que afecten a la comunidad internacional en su conjunto,
no queden sin castigo. Esta instancia internacional será complementaria
de la jurisdicción penal de los Estados nacionales.

 La organización del seminario
se enmarca en la activa participación y en el decidido apoyo
brindado por la Argentina durante todo el proceso de establecimiento
de la Corte Penal. Una instancia de estas características,
de funcionamiento permanente, independiente y eficaz, contribuirá
sin dudas a la protección y respeto de los derechos humanos,
así como al mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales. 
 

 
20 de junio de 2001