El Canciller Jorge Taiana se reunió esta tarde en la sede de las Naciones Unidas de Nueva York con el flamante Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, quien asumiera recientemente la conducción de la ONU en reemplazo de Kofi Annan, y le solicitó la renovación de su gestión de "buenos oficios" ante el Reino Unido sobre la Cuestión de las Islas Malvinas.
En una audiencia mantenida en el piso 38 del edificio sede de la ONU, el titular del Palacio San Martín le transmitió, en su primer encuentro con Ban Ki-Moon, el firme interés argentino en que, desde el inicio mismo de su mandato, renueve la misión de buenos oficios que le fuera encomendada al Secretario General de la ONU por la Asamblea General para asistir a la Argentina y al Reino Unido en el cumplimiento de la obligación de reanudar, sin demoras, las negociaciones bilaterales a fin de resolver la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes.
Taiana expuso ante el Secretario General que “la persistente renuencia del Reino Unido a negociar" sin poder dar cumplimiento a las resoluciones de las Naciones Unidas, no ha permitido arribar a una solución a la disputa. "Por otra parte -dijo el canciller- el Gobierno argentino ha reiterado, en cuanta ocasión ha tenido, su permanente voluntad negociadora".
El Canciller Taiana fundamentó la necesidad de que el Secretario General
renovara la misión que, desde 1982, le viene encomendando la comunidad internacional en el hecho de que la disputa de soberanía -expresamente reconocida por las Naciones Unidas- aún se encuentra pendiente de solución, pese a los reiterados llamamientos de la Asamblea General y del Comité Especial de Descolonización.
Taiana recordó que en 2007 se cumplen no sólo 25 años del Conflicto del Atlántico Sur sino 174 años de la usurpación británica de las islas en 1833.
El Canciller argentino puntualizó que “los 25 años del conflicto marcan un nuevo aniversario de la negativa británica a reanudar el diálogo sobre la cuestión de fondo, en abierto incumplimiento de la obligación que pesa igualmente sobre ambas partes de negociar su solución” y agregó que “la persistencia de una anacrónica situación colonial y la prolongada falta de progresos para su solución definitiva debe ser motivo de preocupación de las Naciones Unidas”.
Por otra parte, Taiana sostuvo que también debería ser motivo de preocupación de la ONU el hecho que el Reino Unido continúe ejecutando, además, actos unilaterales que contradicen tanto el mandato de no introducir modificaciones unilaterales impuesto por la Resolución 31/49 de la Asamblea General así como los entendimientos provisorios que, bajo fórmula de salvaguardia de soberanía, se han acordado en forma bilateral sobre aspectos prácticos derivados de la disputa.
Estos entendimientos provisorios fueron celebrados, al igual que los concertados en la década de 1970, a fin de contribuir al proceso tendiente a la solución definitiva de la disputa, tal como fuera expresamente reconocido por el Representante del Reino Unido ante las Naciones Unidas en una nota del 11 de diciembre de 1970.
El flamante Secretario General agradeció la visita y destacó el liderazgo de la Argentina en materia de derechos humanos y en misiones del mantenimiento de la paz, en particular el papel desarrollado en Haití.
Respecto de la Cuestión Malvinas, escuchó atentamente la exposición que realizó Taiana y manifestó estar informado sobre los desarrollos del tema así como sobre la importancia que la Argentina asigna al mismo, recordando que había tenido oportunidad de tratarlo en diversos encuentros bilaterales durante su cargo anterior de Canciller de Corea del Sur.
Luego de coincidir en la necesidad de arribar a una solución a la disputa, Taiana ofreció mantener informado al Secretario General mediante la remisión de documentación que pudiera asistirlo en la misión de buenos oficios que le fuera encomendada por la Asamblea General y cuya realización fue calificada de “imprescindible” por el Canciller Taiana.