Discurso del Canciller Felipe Solá en la LVI Reunión Ordinaria del Consejo del Mercado Común (CMC) del Mercosur

Miércoles 1 Julio 2020
Información para la Prensa N°: 
153/20

En las sesiones del Consejo del Mercado Común en su número 56 celebradas hoy, miércoles 1° de julio a nivel de cancilleres, el ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto de la Argentina, Felipe Solá, reivindicó el Mercosur como una identidad reconocida internacionalmente, agradeció el apoyo al reclamo argentino por las Malvinas y precisó la posición argentina sobre las negociaciones externas del Mercosur.

Ésta es la transcripción textual de las palabras del canciller, punto por punto y en el orden original, delante de sus pares de Paraguay, Uruguay y Brasil y de los representantes de otros Estados y organismos:

 

*La pandemia. ”El momento nos lleva a la pandemia. Es una tragedia que vivimos de forma diferente pero seguimos de la misma manera. Cada ciudadana o ciudadano que ha muerto es lo mismo para nosotros, cualquiera sea el país de origen”.

 

*La unión. ”La tragedia puesta en el centro de la problemática nos ha unido. Vemos quiénes somos y qué fraternidad tenemos. Somos parte de un continente que parece estar castigado, en distinta medida”.

 

*Las diferencias. ”Somos hombres políticos. No es fácil superar la historia política de cada uno, superar las ideas. Nos puede llevar a disputas, pero puestas sobre la mesa con espíritu integrador serán más fáciles de resolver”.

 

*La sociedad. ”Hace mucho que la sociedad anda por dentro en nuestro Mercosur y le da vida a nuestra unidad. Los pueblos en general no entienden las peleas. Quieren conexión en todos los sentidos: científica, de viaje, cultural. Quieren sentirse, en los países hermanos del Mercosur y en los países asociados, como en su casa. Facilitar los desplazamientos y nuestra política de fronteras son tan importantes como los parámetros que marcan los economistas”.

 

*Los jóvenes. ”No es nuevo que sepamos que la región tiene un bono demográfico: su población joven, que tiene mayores demandas y mayor vocación de capacitarse y circular. Es otro activo que debemos tener en cuenta”.

 

*El futuro. ”La combinación de nuestros recursos naturales, de nuestra capacidad de trabajo por ejemplo en la producción de alimentos, aunque no solamente, sumados al potencial de la población joven, es lo que marca nuestro futuro y nos hace avanzar con hechos concretos, más allá de las palabras”.

 

*La identidad. ”Siempre hablamos de integración y de identidad. Si uno cree que nuestra identidad se afirma en la integración, y que además de la identidad nacional ya hay una identidad del Mercosur reconocida internacionalmente, ve que es un espacio regional que no tiene vuelta atrás”.

 

*Mercosur como proyecto. ”Unidad es integrar. No significa pensar igual o tener la misma política económica. No. No significa ver el mundo de la misma manera. Somos democráticos, y los gobiernos cambian. Pero queda el Mercosur, que es la política de Estado para la Argentina, que no quede duda, y para nuestro país también el proyecto más importante que ha perdurado más allá de los gobiernos en los últimos casi 30 años”.

 

*El mundo. ”Integración es integración física, paso a paso, proyecto por proyecto con cada uno de los países. Conversar, conversar y conversar, para avanzar. Pero integración es una voluntad de salir unidos al mundo. En lo que tengamos que discutir con el mundo, hagámoslo lo más unidos que sea posible, porque seremos mucho más fuertes y más respetados”.

 

*La regionalización. ”El mundo es cada vez más difícil y hoy tiene gran tendencia a cerrarse, porque no tiene otra posibilidad ante los niveles de contagio. No sabemos cómo seguirá ese mundo después de la pandemia, pero suponemos que será un mundo fuertemente regionalizado”.

 

*La ayuda. ”En estos meses he oído hablar mucho de cooperación, he oído hablar mucho del interés europeo por América Latina en general, he oído hablar mucho de coordinación y ayuda en el caso del Covid, y también he oído hablar mucho de financiamiento a los llamados países de renta media, o sea los nuestros. No soy escéptico pero vamos a necesitar ayuda para sacar adelante nuestras economías, golpeadas como nunca, en un mundo que tiende a cerrarse”.

 

*El acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur. ”Así como la pandemia despejó dudas, tenemos una cuestión que generó dudas y rispideces: cómo encarar nuestros convenios externos del Mercosur. Tenemos en marcha el convenio Unión Europea-Mercosur, que después de su faz jurídica pasará directamente a los parlamentos europeos y a nuestros parlamentos. Como gobierno recibimos el acuerdo como tal. Apostaremos a algo a lo que ese convenio nos invita: nos invita a lograr en una década un nivel de cambio tecnológico muy importante que nos permita competir. Hay un desafío implícito. Si uno tiene mucho miedo, no querría firmarlo. Si uno es optimista y piensa que sí se puede, el convenio a lo mejor adquiere un sentido mayor. Nos hubiera gustado de una manera mucho más fácil y tener mucho más acceso de los productos alimenticios de lo que nos han dado. Recuerden que cuando firmamos el acuerdo de la Ronda Uruguay del GATT en 1993 el acceso mínimo de nuestros productos era del cinco por ciento. Europa se integró después mucho más con los países eslavos. Hoy el acceso mínimo que va a quedar si se aplica el acuerdo Unión Europa-Mercosur sería mucho menor. Habremos retrocedido en productos de origen agrario y alimenticios en general”.

 

*El debate. “Vamos a estar en todas las mesas de acuerdo. De ninguna manera vamos a eludir nuestra opinión ni vamos a tratar de obstruir el avance de acuerdos, ni vamos a tratar de ser más pesimistas que el más optimista. De ninguna manera. Pero sí queremos hablar y discutir de todas las maneras posibles. Hoy la tecnología nos permite reunirnos seguido pero nos empobrece por la falta de la invalorable relación personal que permitiría conocernos más, hablar más y visitarnos para agilizar y generar mayor confianza”.

 

*Malvinas. ”Les agradezco la posición por Malvinas. Es un mandato constitucional imprescriptible y la negociación es una obligación ineludible para la Argentina. La solidaridad del Mercosur es motivo de un enorme agradecimiento a los países, a sus autoridades y en este caso a mis colegas cancilleres”.

 

Galería: 
Solá en Mercosur