“La Argentina, por su larga tradición en el uso pacífico de la energía nuclear y con importantes logros en la materia, goza de prestigio y reconocimiento internacional. Por eso, para nuestro país esta candidatura es de suma importancia, y tenemos a la persona indicada”, aseguró el Canciller Jorge Faurie al presentar esta tarde al embajador Rafael Grossi como candidato argentino para liderar el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el más importante a nivel mundial.
En el Palacio San Martín, junto al Secretario de Energía, Gustavo Lopetegui, embajadores, autoridades en materia nuclear y funcionarios nacionales, Faurie señaló que el cargo de Director General del OIEA “requiere antecedentes relevantes y conocimientos muy específicos. Grossi tiene 35 años de experiencia profesional en no proliferación y desarme; ha ejercido primeros puestos tanto en el OIEA como en la OPAQ (Organización para la Prohibición de las Armas Químicas); ha estado al frente de grupos de expertos de la ONU, trabajó en los regímenes de control de exportaciones nucleares y da conferencias por todo el mundo”.
“La Argentina, por su parte, tiene un programa nuclear avanzado, tres centrales de potencia en funcionamiento, un reactor de diseño nacional en construcción, numerosos reactores de investigación, capacidades de producción de combustibles nucleares, agua pesada y radioisótopos medicinales. Formamos parte del reducido número países proveedores nucleares, y desarrollamos un marcado perfil exportador y una diplomacia protagonista en los foros internacionales.”, especificó el Canciller.
Entre otros logros argentinos, Faurie puso de relieve el dominio del ciclo de combustible nuclear; las exportaciones de reactores de investigación del INVAP a Argelia, Perú, Egipto, Australia, Países Bajos y Arabia Saudita; la presidencia argentina (a cargo de Grossi) de la reunión global sobre seguridad nuclear tras el accidente de Fukushima; el ingreso a la agencia nuclear de la OCDE y el trabajo conjunto con Brasil -a quien agradeció el apoyo a la candidatura de Grossi- en particular la creación de la Agencia Brasileño-Argentina de Contabilidad y Control de Materiales Nucleares.
El jefe de la diplomacia argentina enfatizó especialmente el papel de América Latina y el Caribe como “pioneros en la contribución al régimen de no proliferación: establecimos la primera zona densamente poblada del planeta libre de armas nucleares. Desde el tratado de Tlatelolco en 1967 demostramos nuestro compromiso en la materia y hemos sido fuente de inspiración para otras regiones. Sin embargo, nuestra región es la única que jamás pudo conducir el organismo internacional de energía atómica”.
“Por eso ahora, luego de seis décadas donde la Argentina mostró políticas coherentes, consistentes y reconocidas, tenemos al candidato natural para dirigir el OIEA. Es un honor proponerlo por su liderazgo diplomático, integridad profesional y compromiso frente a los exigentes objetivos que aspiramos para el organismo en esta nueva etapa”, concluyó.
Lopetegui, por su parte, dejó en claro “el compromiso que ponemos desde el Gobierno nacional para que la Argentina vuelva al sendero del que no debiera haberse ido nunca”, a la vez que resaltó que la candidatura “abre una ventana para que nuestras capacidades nucleares sean más conocidas por el resto del mundo”.
El Embajador Grossi, a su vez, destacó “el papel central del OIEA en la preservación de la paz y la seguridad internacionales así como su contribución al desarrollo y al bienestar a través de la promoción de los usos pacíficos de la energía nuclear”. Indicó también que “la escena internacional se enfrenta a incertidumbres y desafíos y que el aporte del OIEA es indispensable para la resolución pacífica de situaciones de tensión como en Irán o en Corea del Norte”.
Grossi consideró que “la Argentina, con más de sesenta años de tradición en una política nuclear pacífica y no proliferante está lista a jugar a través de su candidatura un papel constructivo y activo en esta temática clave del devenir internacional”. Por ultimo rindió homenaje a los hombres y mujeres de la ciencia y la tecnología en la Argentina “que sustentan con sus logros una diplomacia nacional activa y que hoy se refleja en esta candidatura”.