El día 7 de mayo de 2021 tuvo lugar la conferencia "Hacia un ambiente laboral libre de violencias: Convenio 190 OIT" a cargo del experto de la OIT Javier Cicciaro, quien trabaja en actualmente en el Proyecto de ese organismo de la Iniciativa Spotlight, en conjunto con la Unión Europea y las Naciones Unidas para la eliminación de las violencias contra las mujeres y las niñas en nuestro país.
La presentación y moderación estuvo a cargo de la Directora de la Mujer y Asuntos de Género, Ana Sarrabayrouse, quien resaltó la importancia de continuar con este ciclo de conferencias abiertas a todo el personal de Cancillería, que permiten sensibilizar y abordar temáticas tan importantes como en esta ocasión la violencia laboral.
Por su parte la responsable a cargo del Punto Focal en materia de Género de Cancillería (FOGENE) y del Observatorio de Género de Cancillería, Tamara Oberti, señaló que estaban trabajando en la conformación de ambas áreas y en los proecedimientos para canalizar y dar respuestas de forma efectiva a los casos particulares. También destacó la necesidad de realizar capacitaciones para prevenir y erradicar todo tipo de violencias laborales.
En su exposición, Javier Cicciaro destacó que nuestro país es uno de los cinco que ratificaron el Convenio 190 de la OIT y que éste tiene por tanto naturaleza vinculante para nuestro país. En cuanto a la Recomendación 206, orienta sobre la implementación del Convenio.
Habló de los principios fundamentales del Convenio :
a) Respetar, promover y asegurar el disfrute del derecho de toda persona a un mundo del trabajo libre de violencia y acoso;
b) Adoptar un enfoque inclusivo, integrado y que tenga en cuenta las consideraciones de género;
c) Reconocer las funciones y atribuciones diferentes y complementarias de los gobiernos, los empleadores y los trabajadores, con la naturaleza y el alcance variables de sus responsabilidades;
d) respetar, promover y llevar a efecto los principios fundamentales en el trabajo y fomentar el trabajo decente;
e) Garantizar el derecho a la igualdad y a la no discriminación, incluyendo a las trabajadores, así como a los grupos vulnerables o en situación de vulnerabilidad que están afectados de manera desproporcionada por la violencia y el acoso.
Entre otras cosas, destacó que nuestro país ya cuenta con normativa por lo que se está trabajando en la adecuación y actualización conforme a las nuevas normas internacionales, que requiere de una articulación con muchos más actores. Por último, destacó la importancia de la capacitación y sensibilización en esta temática y la necesidad de políticas de formación que permitan avanzar en el cumplimiento del Convenio.