1901-1905

AÑOS DECISIVOS
La cabaña de Cerro Nevado en la actualidad
La cabaña de Cerro Nevado en la actualidad

Los primeros años del Siglo XX constituyen el momento decisivo del Estado argentino en la Antártida debido a una serie de acciones precursoras que serán llevadas a cabo con una aguda visión de futuro y se caracterizarán por su heroísmo y espíritu emprendedor. Aquellos hechos protagonizados por la República Argentina en la Antártida comienzan con la ayuda brindada a la Expedición Antártica Sueca de 1901, en la que participaría el alférez José María Sobral. A esta acción solidaria que inaugura una rica historia de cooperación científica internacional en la Antártida le sigue el rescate de dicha expedición por la corbeta ARA Uruguay, abriendo así también un fértil camino de rescates antárticos protagonizado por ciudadanos argentinos que se extiende hasta nuestros días. De importancia trascendental fue la toma de posesión del observatorio de las Orcadas del Sur, que expresó claramente que la ciencia y el Estado argentino llegaron para quedarse en aquella región. La fundación de la Compañía Argentina de Pesca ese mismo año implicó que durante medio siglo el sector privado acompañara la presencia estatal, brindado su apoyo a las dotaciones científicas. La designación de autoridades nacionales para aquellos territorios y la compra de un buque polar para la Armada Argentina constituyen el cierre de este singular período fundacional.

  • 1902

    Sobral: el primer invernante

    El alférez José María Sobral realizando mediciones científicas en Cerro Nevado
    El alférez José María Sobral realizando mediciones científicas en Cerro Nevado

    En los primeros años del Siglo XX comienza la actividad científica argentina en la Antártida a través de la ayuda brindada a la Expedición Antártica Sueca del Dr. Otto Nordenskjöld a fines de 1901 y con la participación en la misma del Alférez de Navío José María Sobral. Sobral se transformó así en el primer argentino que llegó a la Antártida en carácter oficial como representante del Estado nacional invernando en la Antártida, haciéndolo por dos años consecutivos, periodo en el que cumplió sus tareas técnicas científicas a través de observaciones en meteorología, geodesia y geomagnetismo.

  • 1903

    La corbeta Uruguay al rescate

    La Corbeta ARA Uruguay en bahía Pingüino, isla Marambio, durante el rescate
    La Corbeta ARA Uruguay en bahía Pingüino, isla Marambio, durante el rescate

    En el otoño de 1903, ante la ausencia de noticias de la Expedición Antártica Sueca del Dr. Otto Nordenskjöld el Estado argentino emprendió los preparativos para una operación de rescate. La misma fue lograda con éxito por la corbeta argentina ARA Uruguay, bajo el mando del teniente de navío Julián Irízar. Los heroicos marinos argentinos rescataron a los náufragos del Antarctic, barco de la expedición, y a los científicos invernantes, entre ellos el alférez argentino José María Sobral, hazaña que fue reconocida mundialmente. El rescate creó un lazo emocional entre la sociedad argentina y la Antártida, además de demostrar que el Estado argentino poseía los medios mecánicos y humanos para actuar en aquel continente. Actualmente la corbeta ARA Uruguay puede ser visitada ya que funciona como museo en el puerto de Buenos Aires.

  • 1904

    Orcadas del Sur y la presencia más antigua

    Observatorio en las Orcadas del Sur, 22 de febrero de 1904
    Observatorio en las Orcadas del Sur, 22 de febrero de 1904

    El 22 de febrero de 1904 la República Argentina toma posesión del Observatorio Meteorológico en las Islas Orcadas del Sur y se establece así la presencia permanente de la Argentina en la Antártida, hasta hoy la presencia más antigua en forma ininterrumpida. Desde entonces la actividad científica de la Argentina en la Antártida ha sido continua. Por este motivo en cada aniversario es celebrado el Día de la Antártida Argentina. Entre los miembros de aquella primera dotación se encontraba el joven voluntario Hugo Acuña, estafeta postal cuyo diario es una de las primeras obras de la literatura antártica argentina. El observatorio original, que consistía de una casa de piedra conocida como la casa Omond, había sido instalado por la Expedición Antártica Escocesa en 1903, liderada por William Speirs Bruce, quien donó el observatorio al Estado Argentino a fines de 1903 y efectivizó la entrega aquel 22 de febrero. Por Decreto del Poder Ejecutivo del 2 de enero de 1904 el obervatorio pasó a manos argentinas y se dispuso el establecimiento de uno nuevo con personal del Ministerio de Agricultura. Al año siguiente la Argentina construyó allí un moderno observatorio, que sería su primera instalación antártica y que hoy constituye el museo de la base, conocido como Casa Moneta.

  • 1904

    Fundación de Grytviken y la CAP

     Barcos arponeros de la CAP en Grytviken, con la bandera argentina en las chimeneas
    Barcos arponeros de la CAP en Grytviken.

    El rescate de la Expedición Antártica Sueca realizado por la corbeta ARA Uruguay tuvo también como consecuencia la fundación de la primera empresa ballenera austral: la Compañía Argentina de Pesca, cuyos barcos navegaban bajo bandera argentina y llevaban sus colores en las chimeneas. La compañía, conocida como CAP, surgió del contacto de empresarios argentinos con Carl Anton Larsen, comandante del buque de la expedición sueca, que se desempeñaría como gerente de la flamante empresa. Él mismo dirigió en noviembre de 1904, con apoyo del ARA Guardia Nacional, la instalación de la factoría en Grytviken, Georgias del Sur, islas que hasta ese momento se encontraban deshabitadas. Al año siguiente se instalaría allí un observatorio meteorológico y magnético argentino que funcionó hasta 1950 informando a los barcos de la CAP, muchos de los cuales participaron de numerosas campañas antárticas argentinas brindando apoyo y relevando dotaciones.

  • 1905

    El buque polar Austral

    Goleta ARA Austral
    Goleta ARA Austral

    A principios de 1905 la corbeta ARA Uruguay se interna por segunda vez en aguas antárticas nuevamente en misión de rescate debido a que no se tenían noticias de la Expedición Antártica Francesa de Jean-Baptiste Charcot, que había invernado en la Antártida con la goleta Le Francais. Afortunadamente la expedición francesa retorna en perfectas condiciones. A su regreso, Charcot vende su goleta al Estado argentino que la renombra Austral y a fines de ese año realiza el relevo del observatorio de Orcadas del Sur. Al año siguiente el Austral zarpa de Buenos Aires con esa misma misión y con el objetivo de instalar otro observatorio en una isla junto a la Península Antártica, transportando a bordo a las primeras autoridades antárticas argentinas, pero la goleta naufraga en un fuerte temporal en el Río de la Plata, causando una considerable postergación en los planes antárticos argentinos.